La compra de una propiedad es una de las operaciones más trascendentes (y costosas) en la vida de una persona. Más allá de que pueda mudarse en un futuro, los ahorros necesarios para adquirir un inmueble, más los gastos que conlleva, hacen que no se pueda estar cambiando de hogar constantemente.
De acuerdo con esto, en esta nota te contamos una serie de factores a tener en cuenta para equivocarse lo menos posible al momento de realizar una inversión.
1.- No mirar la orientación de la unidad. Hay que tener en cuenta que un departamento al sur vale menos que al norte. “En este último caso, el departamento cotiza un 5% más que una con orientación oeste o este y una propiedad con orientación sur vale un 5% menos que una al este o al oeste.
Por otro lado, un departamento lateral, aunque tenga vista abierta, vale un 10% menos por la posibilidad de que se construya algo que tape la vista y el frente vale más que el contrafrente salvo que el contrafrente tenga una muy buena vista. En cuanto a los pisos, una planta baja vale un 10% menos y un piso alto, un 10% más, salvo que sea un último piso.
Esta información resulta importante para saber si lo que se está comprando hoy por más lindo que sea va a valer lo mismo mañana.
2.- No pedir la documentación antes de firmar la reserva. En el caso de los inmuebles usados, en muchos casos, no se exige la copia de los planos aprobados lo que puede devenir en sorpresas futuras con relación a los metros cuadrados construidos que no figuran en el plano e incluso recibir multas en un futuro por dicha causa. Además, siempre en los casos de los PH se debe exigir el reglamento de copropiedad para ver las limitaciones al uso, las obligaciones y los derechos de cada una de las unidades.
3.- No recorrer la zona de noche ni analizar las propiedades vecinas. Siempre recomiendo visitar la propiedad y su entorno en distintas horas del día y en distintos días de la semana para asegurarse cómo es la vivencia real y no encontrarse con sorpresas. Ver muy bien los linderos, cómo están ocupados, qué posibilidad de transformación tienen y cómo eso puede impactar en la propiedad que voy a adquirir (ocupaciones informales, ruidos molestos, polución, etc.).
4.- En las compras al pozo, no realizar una lectura minuciosa del contrato. Es un error muy común no hacer una lectura minuciosa y pormenorizada con consultores ajenos a la operación comercial de venta de las condiciones del contrato y especificaciones. Eso evita sorpresas de mayores costos y tiempos de entrega y/o menos calidad constructiva y dimensiones que lo pactado.
5.- El apuro es mal consejero. Todo lo anteriormente dicho implica tiempo, algo que no debe escatimarse. La compra de un inmueble hecha con apuro puede llevar a no sentirse conforme luego de la mudanza. El costo de transacción que involucra la compra de una propiedad es considerable. Por lo tanto, la decisión debe tomarse con tranquilidad.
6.- No analizar los costos de mantenimiento del inmueble. Los gastos comunes también debes ser analizados en profundidad sobre todo con respecto a los ingresos que se esperan obtener para evitar dolores de cabeza posteriores.
7.-Enamorarse de la propiedad o de alguna variable específica como por ejemplo la vista. Resulta muy común encapricharse con algún atributo particular del inmueble el cual, luego de mudarse, se termina convirtiendo en algo que no agrega gran valor. Priorizar siempre la luz natural y la ubicación da buenos resultados.
8.- No definir la compra de una propiedad porque no reúne el 100% de tus expectativas. La indecisión también puede ser un gran error. A veces resulta que encontras una propiedad que reúne el 85% de todo lo que buscas y por ahí por ese 15% no avanzas. Podes estar seis meses buscando y nunca vas a encontrar lo que esté perfecto. En estos casos, es importante tener en cuenta aquello que mejor se aproxima a tu necesidad, y al presupuesto disponible y si es necesario resignar alguna exigencia, como amenities, pileta o terraza, etc.
Finalmente, nuestra recomendación para evitar cometer estos errores es que te asesores con un profesional especializado, el cual se involucre en la búsqueda, te escuche activamente, esté atento a tus necesidades y fundamentalmente, que lleve a cabo el proceso de compra de una forma estratégica, sin improvisaciones para lograr encontrar el inmueble que mejor adapte a tus intereses.
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Fuente:
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